HELADO DE TURRÓN DE JIJONA

Me compré la heladera de Lidl y por fin le llegó su momento. He escogido un clásico, el helado de turrón. Entre las muchas recetas que he visto me he quedado con la de Sara que tiene una página fantástica con muchas otras recetas de helados que seguro probaré.

Entre los ingredientes necesarios aparece el azúcar invertido que también preparé para ayudar a que al helado no se le formen cristales de hielo.

INGREDIENTES PARA EL AZÚCAR INVERTIDO
350 g de azúcar
150 ml de agua mineral
sobrecitos de impulsor, lo que se conoce popularmente como gaseosas: el sobre blanco (ácido tartárico y málico)y el morado (bicarbonato sódico)

El azúcar invertido es un líquido o jarabe resultante del proceso de inversión del azúcar que gracias a la acción ácida o enzimática se separa en sus dos componentes. Se obtiene así un almíbar con igual contenido de glucosa y fructosa. Las características que hacen útil al azúcar invertido en pastelería, confitería y heladería son que tiene mayor poder endulzante que el azúcar común (un 30% más), dificulta la cristalización del agua y acelera la fermentación de la masas con levadura. Su preparación en casa no tiene ninguna complicación.

En un cazo ponemos el agua, el azúcar y el sobre blanco. Lo ponemos al fuego y dejamos que se caliente hasta que arranque a hervir, momento en que lo retiramos del fuego. Dejamos que se enfríe hasta 50ºC y en ese momento añadimos el sobre morado removiendo bien para ajustar el ph. Se formará una espuma blanquecina que según se enfríe irá desapareciendo. Este azúcar invertido se conserva bien en un recipiente hermético en la nevera.

INGREDIENTES PARA EL HELADO
200 ml de leche
200 ml de nata del 35% de materia grasa (la de montar)
2 cucharadas soperas de azúcar invertido
una tableta de turrón de jijona

Para hacer el helado mezclamos bien todos los ingredientes con la batidora y guardamos tapado en la nevera al menos 4 horas antes de usar la heladera. Previamente abremos guardado al menos 24 horas en el congelador la cubeta de la heladera.

Cuando vayamos a hacer nuestro helado montamos la cubeta, ponemos las aspas y tapamos, y la ponemos en marcha seleccionando el numero uno. Todo con la mayor agilidad y rapidez posible. Introducimos en marcha por la abertura superior la mezcla para que no se pegue a las paredes. En una media hora nuestro helado estará listo. Podemos optar por consumirlo inmediatamente o guardarlo en el congelador en un recipiente hermético.

Si no tienes heladera no tienes porque renunciar a hacer helado casero, tendrás que trabajar más pero el resultado puede ser igualmente bueno. Bastará con que metas la mezcla en el congelador y a la hora cuando se haya congelado la saques y batas energicamente para romper los posibles cristales. Después la volverás a meter al congelador y cada 30 o 45 minutos durante 2 o 3 horas repitas la operación para conseguir la cremosidad que debe tener.

¡Qué fácil y qué rico está!. Creo que este verano va a ser el de los heladitos caseros, je, je,...