Ingredientes:
1/2 litro de agua
1/2 litro de leche
2 Cucharadas de anis en grano
5 Cucharadas de azúcar
6 Cucharadas de harina
Cáscara de naranja
Canela en rama
Aceite
Pan
Reedito una vieja entrada de las primeras de mi blog cuando muy pocos (o casi nadie, seamos honestos) venían hasta mi cocina. Es una receta a la que tengo un especial cariño y en estos días en que las costumbre anglosajonas se están apoderando de nosotros con Halloween, me apetecía volver a subir. Espero que os guste.
En la noche de todos los Santos, 31 de octubre, se tomaban los puches. Se reunían en las casas las familias o amigos para degustarlos. El significado de esta fiesta, más allá de la parte gastronómica y familiar tiene que ver con las creencias sobre esa fecha. Esa noche regresan a los hogares las almas de los muertos al calor del hogar familiar. Pero los buenos espíritus no vienen solos, junto a ellos llegan los malos espíritus, productores de enfermedades, catástrofes y desgracias. Por ello, esa noche antiguamente no se salía de casa, se posponían los viajes para otro día y toda la noche estaban tocando las campanas con la intención de alejar a los malos espíritus. La festividad de la noche de todos los santos ha llegado a nuestros días como una noche en la en muchas casas todavía se elaboran los puches. Entre ellas la de mi madre y la mía, pues he decidido continuar con esta tradición del pueblo llano en lugar de copiar la fiesta de Haloween a la que todavía me resisto.
Comenzamos cortando en dados el pan y en una sartén con aceite los doramos. Reservamos los picatostes.
Ponemos a cocer en un cazo el agua con los anises. En cuanto empiece a cocer apagamos el fuego y dejamos enfriar.
En una cacerola disolvemos el harina y el azúcar en frio sin que queden grumos en el medio litro de agua (para ello utilizamos la infusión de los anises colada) y el medio litro de leche. Añadimos cáscara de naranja y canela en rama y lo ponemos al fuego. Según los gustos admite más azúcar que la que yo he puesto. Con unas varillas removemos, sin dejar de hacerlo para que no se pegue, hasta conseguir una crema espesita y sin grumos.
Repartimos caliente en cuencos y servimos acompañadas de unos picatostes. Salen cuatro buenas raciones.
Se pueden comer calientes o frios, va en gustos.
Antiguamente en las navidades de los humildes también se conocía como el turrón de los pobres. Se dejaban enfriar y se cortaban en porciones. Un clásico entrañable y familiar que sabe a hogar. Muy rico.
Imaginate: lloviendo, un frio que pela y tu en casita, tan calentito, viendo una película, pero falta algo, voy al rincón de Marus a buscar algunas idea, ¡ah! que bueno como los hacía mi madre, pero no se si seré capaz,bueno vamos a ello...., me faltan algunos ingredientes pero improvisaré, no terngo anis en grano pero tengo anis Castellana, no se no se, vamos a intentarlo. Después de un ratito de nada "voila" vaya puches ricos que me han salido, las chicas estan encantadas y muy contentas, ¿será por el anís?. Eres una fenómena hermana, un besazo.
ResponderEliminarQue delicia y la historia maravillosa!!!
ResponderEliminarBesotes :D
The combo of orange, aniseeds and cinnamon is outstanding and what a lovely story! Cheers,
ResponderEliminarMamatkamal
No puede ser más sencilla y rica esta entrada, estupenda historía, sin duda un buen blog, me quedo por aquí y ahora mismo me hago seguidora tuya. UN BESO Y GRACIAS POR VISITAR MI HORNO!!
ResponderEliminarUna gran receta y con historia, me encantan estas recetas tradicionales, no debemos perderlas. Un fuerte abrazo, Teresa
ResponderEliminaruna tradicional receta que no conocia y se ve muy rica.Gracias por compartirla
ResponderEliminarbexinos
Una receta fantastica que no conocia,tomo para hacerla en cuanto pueda seguro esta rica rica.
ResponderEliminarBicos mil wapa.
me encanta visitar tu blog porque siempre voy aprendiendo algo sobre las tradiciones gastronómicas (y no solo) de España... mil gracias de corazón!! no veo la hora de probar esta receta tanto sencilla como rica!
ResponderEliminares una buena idea reeditar las entradas, porque esta receta a mi se me había pasado ;)
ResponderEliminarsalu2, Paula
http://conlaszarpasenlamasa.cultura-libre.net
http://galletilandia.cultura-libre.net
Que lindo plato, no lo conocía. Me gusto mucho, nunca había visto el pan así sobre la leche.
ResponderEliminaruna grandisima historia al igual q la receta.
ResponderEliminarme quedo de seguidor de tu blog y te invito a q te des una vueltecilla x el mio.
un saludo
http://lacocinademou.blogspot.com
No lo conocía, qué delicioso plato parace y lleno de tradición, como Dios manda...Que no se pierdan estas cosas tan bonitas, por favor...
ResponderEliminarUna entrada super completa, receta e historia, dos por uno!
ResponderEliminarUna receta muy original mi niña y que no conocia pero me has tentado,así que tomo nota para probar.
ResponderEliminarUn besote enorme cielo.
En córdoba hay una receta parecida que se llama "Gachas"
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, hay que sacar a la luz nuestras tradiciones
Besos. Ana
No conocía esta receta pero me gusta, además receta tradicional de aquí cómo debe ser.
ResponderEliminarSaludos
wow...totally yummmmmy...
ResponderEliminarTasty Appetite
Es la primer vez que veo esta receta. Y la historia me ha encantado...
ResponderEliminarLo que tú llamas puches con las gachas que hacía mi madre. Su receta no la recuerdo, pero el resultado es muy parecido. En casa las tomabamos frías, como postre, y lo que también hacíamos, en ocasiones, es lo que comentas de cortarlas en porciones.
ResponderEliminarCiertamente la tradiciones se pierden, es una pena. Estas gachas nunca las he hecho, y mira que me gustaban. Lo que sí que me resisto a perder es la tradición de los pestiños en Semana Santa, muy típicos en mi pueblo, y motivo de reunión familiar para elaborarlos. Esto también se ha perdido, escasas son las familias que todavía los elaboran en plan casero.
Oye... no conocía yo este ponche, qué bueno.
ResponderEliminarUn beso.
¡Puches, Irmina, ja, ja,...!
EliminarNo lo había visto nunca. Así que tomo nota, me parece que tiene que estar muy rico.
ResponderEliminarBesos.
Maravillosa entrada!! Me ha encantado tanto la historia como la receta. Da gusto venir aqui.
ResponderEliminarBicos.
Yo también opino que aunque es bueno aprender de los demás, no es tan bueno perder nuestras tradiciones.Preciosa tu entrada.
ResponderEliminarUn besín
Hola!! Sin duda tienen que estar riquísimas. Una consulta, ¿podría decirme de qué pueblo son típicos los puches? Estoy haciendo una entrada sobre costumbres de Todos los Santos y me ha interesado mucho lo que cuenta. Le dejo mi correo otrodiaperfecto12@gmail.com
ResponderEliminarMuchas gracias!!
Saludos,
Mis abuelos eran de un pequeño pueblo de Guadalajara y de ahí viene la tradicción
EliminarEs un postre típico también de toda la zona de los Montes de Toledo. Se les dice en femenino “ las puches”
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